INGREDIENTES:
250 ml Agua (zumo o pulpa de algún sabor)
15 g Gelatina sin sabor.
2 cdtas. Esencia de vainilla (opcional)
1 pizca Sal.
Azúcar antihumedad (sino glass)
Colocar en una olla el azúcar y cubrir con la mitad del agua.
Cocer a fuego lento hasta conseguir almíbar a punto de hilo fuerte (este punto es cuando tomamos un poco de almíbar con los dedos y al juntarlos y separarlos se forma un hilo que no se rompe).
Mientras, en un bol batir la gelatina previamente hidratada y derretida con el resto del agua, la sal y la esencia si la llevara. Cuando el almíbar esté a punto de hebra incorporar en forma de hilo sin dejar de remover con las varillas (preferiblemente con varillas eléctricas). No deje de batir hasta que la preparación esté esponjosa y blanca (si en vez de agua llevara pulpa nos fijaríamos solo en que esté esponjoso).
Espolvorear un taper o una bandeja con azúcar antihumedad, añadir la masa, tapar con más azúcar y dejar reposar.
Una vez frío cortar al gusto.
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